Joaquín López Dóriga
Cuando Andrés Manuel López Obrador
defendía su triunfo en las elecciones de 2006, culpó a sus seguidores por no
haber cubierto todas las casillas y, en algunos casos, de haberse prestado a
actos de corrupción para venderlo.
Ahora, seis años después, amplía el
error.
Primero fue cuando en Tercer Grado
dijo que si perdía las elecciones sería por un acto de masoquismo colectivo del
pueblo de México.
Luego, cuando ante los conteos
rápidos y el PREP que no le dieron la ventaja que había asegurado tener, tres
puntos de acuerdo con su encuesta, lo extendió al decir que quienes votaron por
Enrique Peña Nieto lo hicieron por corruptos: Votaron para mantener el régimen
de corrupción, no tengo la menor duda de que eso es lo que significa ese voto,
dijo.
No creo que esto le aporte nada a
la ahora agonizante república amorosa de la que había hablado, cuando afirma
que 19 millones de mexicanos son corruptos o vendidos.
¿De verdad piensa eso de 19
millones de mexicanos…?
En la otra vertiente, insiste en
desconocer los actuales resultados, en declarar su triunfo si se limpia la
elección de votos comprados, en exigir, más allá de la ley, la apertura y
recuento de la totalidad de las casillas y en amarrar legalidad de la elección
a su triunfo electoral para lo que considera, según ha dicho, una estrategia
que va de la nulidad del proceso a la resistencia civil, a partir de la
impugnación legal, en lo que está en todo su derecho, como lo está, al final,
de pedir la anulación y de encabezar un movimiento social de rechazo.
El tema, otra vez, lo lleva del
terreno legal al político, la calle y la plaza, que es lo suyo, y a la
movilización de la que ya se deslindó cuando, sin que se lo preguntaran, dijo:
Es que no se puede nada más estarnos cargando la responsabilidad de un hecho
tan grave: me refiero a que nosotros tengamos que sofocar la gran inconformidad
que existe, cuando es él quien convoca y promueve.
Y si todo esto no es un conflicto
pos-electoral, que me digan qué lo es.
RETALES
1 POR VOTO. En sesión
extraordinaria, el IFE reiteró la negativa a abrir las 143,437 casillas como
exigía el Movimiento Progresista. Pero dejó la responsabilidad a los consejos
distritales,
2 DELEGADO. Vecinos de Polanco me
hicieron llegar documentación sobre una grave acusación penal contra el
candidato ganador a la jefatura de la delegación Miguel Hidalgo, Víctor Hugo
Romo Guerra, del PRD, derivada de una denuncia en su contra de Jessica Yareni
Aguilar Castellanos, y
3 FUERA. Ya inició el proceso de
expulsión de Vicente Fox de las filas del PAN, mientras él, desde París, sigue
festejando el triunfo de Enrique Peña Nieto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario