miércoles, 2 de noviembre de 2011

EL ETERNO RETORNO

Desde que me volví inquilino del DF algunas cosas me inquietan a parte de la contaminación, la inseguridad y el tráfico. Esto último me llevó a probar la bicicleta como medio de transporte sustentable. Acepto que no me fue sencillo, uno tiene que aprender varias cosas, así como a desprenderse de otras. No se trata de subirse y pedalear como en la infancia. Hay que agudizar los sentidos, dejar en la bolsa los audífonos, checar los puntos básicos de la bici, no olvidar la herramienta elemental para un avería, haber cargado la lámpara por si lo noche nos agarra en el camino y los que cada quien guste añadir. A lo anterior hay que sumarle la disciplina de no ir en sentido contrario o por la banqueta, lo cual dificulta un poco el recorrido, si no se conocen las calles de esta ciudad.

Hay quienes opinan que no se cuenta con la infraestructura necesaria para los ciclistas (ciclovías), difiero de ello, lo que en verdad se requiere, es una cultura vial eficiente, entre peatones, ciclistas y automotores. Cabe destacar que no se trata de segregar sino de compartir áreas (difícil tarea).

Llevo alrededor de 5 meses rodando en la "Capirucha" y hasta el momento hemos salvado la integridad, no soy ciclista que guste de los paseos grupales, creo que son divertidos pero algo engañosos, más cuando un número importante de patrullas va cuidando al contigente. Los cierres a las arterias viales deben de poner muy de malas a los conductores, con lo que se confirma que "no se trata de segregar sino de compartir". Es decir, si yo salgo en bici para relajarme un poco o hacer ejercicio no debo pedir que se cierren las calles para que yo no corra ningún peligro, en ese punto tienen razón los automovilistas (para eso hay parques).

Para quienes ponen pretextos de seguridad para andar en bici, ahí va el primero: Hay que perder el miedo a compartir.
TIMBRE: El hacerte visible no significa que te conviertas en un "arbolito de navidad" rodante, las luces en exceso pueden también distraer a otros y generar un accidente.

1 comentario:

Seth domínguez dijo...

Felicidades Hernan! Me encanta leer tus opiniones. Espero vengan más. Comparto tú opinión en cuanto al exceso de luces y los paseos. Cabe mencionar que quizá el paseo sirve para introducir gente a la bici urbana y que quizá eventualmente, la gente la utilizaría como medio de transporte. Ojalá más ciclistas de "hueso colorado" dedicaran tiempo a la reflexión de la bici. Siento que a veces sólo nos dejamos llevar por el equipo, las rodadas, paseos, etc. Saludos!