El viernes 17 de diciembre de este 2010 se vivió uno de los episodios mediaticamente más violentos del año.El homicidio de Marisela Escobedo fue el que tuvo más presencia en los espacios informativos quizá sólo un poco opacado por la increíble fuga de reos del penal de Nuevo Laredo, la cual superó el centenar de delincuentes. Lo cotidiano de los actos de injusticia en el país nos ha llevado más allá del hartazgo al lado más pasivo y abnegado de nuestros derechos.
Si bien la justicia se dice ser expedita, ésta depende de una serie de procesos que la entorpecen en cada paso y que terminan haciéndola de díficil acceso a la ciudadanía. Sin embargo lo que se requiere en realidad no es que la apliacación de las leyes sea rápida, simple y llanamanete se demanda que sea aplicada, ya que lo que enferma y lo que atenta contra la dignidad, es la ausencia de su aplicación. En resumen, no son las leyes mexicanas las que están mal o las que no funcionan, simplemente se trata de otro rubro más sencillo pero absurdamente necio y es la no aplicación de éstas en los actos delincuenciales que ahora nos mantienen en un estado de psicosis colectiva...
1 comentario:
pues si, si claro, y ujum. La verdad que el asesinato de la doña esa puf crminalmente rudo, ni modo, asi es esto. La ley está pintada cobrando sueldos de maestros ór así decirlo.
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